Análisis: Kit robótica programable Q-Scout de Robobloq
Esta review es gracias a que la tienda RCTecnic han sido tan amables de enviarnos un coche robótico Robobloq Q-Scout.
Se trata de un robot basado en Arduino que recuerda poderosamente al clásico mBot de Makeblock. La opinión y análisis de este artículo es personal y no patrocinada.
¿Qué es Robobloq Q-Scout?
Se trata de un kit de robótica estilo coche con un montón de piezas metálicas que le dan un aspecto sólido, y lo más importante basado en Arduino. En la caja os encontraréis con:
- Un sensor ultrasónico (son como 2 ojos que van en el frontal que emiten luz de colores gracias a unos leds).
- Un sensor infrarrojo (el típico seguidor de líneas montado en la parte inferior).
- La Qmind, que es la pequeña placa de Arduino UNO que hace de corazón del Q-Scout. Es una resistente pieza de plástico transparente, a la que le sobran 2 conexiones para ampliar sensores. Toda la conectividad de sensores se realiza a través de los típicos cables RJ 11, los de los teléfonos fijos de toda la vida. La misma placa emite sonidos y tiene un par de leds de colores.
- El compartimiento de las pilas. No están incluidas, son 6 de las LR6. Por si queda alguien que todavía no se haya pasado a las pilas recargables, mejor recargables.
- Los 2 motores de las 2 ruedas frontales. Detrás lleva una bola metálica que permite realizar unos giros muy pronunciados, además de ahorrar en piezas y simplificar el robot.
- 1 destornillador, 1 llave inglesa y cinta negra. Que mira, parecerá una tontería, pero te ahorra estar buscando en la caja de herramientas (¡o bajar a la ferretería!). Son las 2 herramientas que necesitas para completar la construcción… Y la cinta negra para que siga líneas.
- El resto de piezas metálicas del robot de un característico verde, cables RJ 11, un cable USB, ruedas, tornillos y tuercas.
¿Cómo se monta?

Como es habitual no hay instrucciones en papel, hay que bajar una aplicación (para iOS y Android) y seguirlas ahí. El montaje es sencillo, 16 pasos de los cuales 3 son la instalación de las baterías (¡no se fían de nosotros!). Si alguna vez habéis completado un Lego (o un mueble del Ikea) tendréis cero problemas, en menos de 30 estará montado. Como mucho os pasará como a nosotros, que nos dejamos una pieza en la caja y no había manera de encontrarla.
La app sirve también para controlar el robot, pero es posible que os pida primero una actualización del firmware del Q-Scout. Para esto sí que deberéis conectar a Q-Scout por USB, y descargar la aplicación oficial al ordenador (Win32, Win64, macOS, Linux, aquí tenéis los enlaces). Veréis el típico entorno basado en Scratch tan habitual en placas basadas en Arduino y, como en estas, tocará instalar un driver, conectar el Q-Scout con el cable USB incluido y actualizar el firmware. A diferencia de otros trastos que hemos probado basados en Arduino, ¡este conecta a la primera!
También podemos conectar vía Bluetooth pero, qué queréis que os diga, para actualizaciones de firmware me fío más del USB. Es un proceso sencillo al que solo se le puede achacar que las instrucciones de actualización del firmware estén en inglés. Pero son sencillas y muy visuales.
¿Qué puede hacer el Q-Scout?

Hablemos primero de la app para tablet y móviles. De entrada permite un control remoto al estilo coche teledirigido. Cuesta un poco cogerle el truco porque para nuestro gusto responde un tanto súbitamente a los giros (creo que lo han arreglado en la última actualización de la app, o eso o ya estaba más fino hoy) pero es divertido. Lleva 3 botones para hacerle encender las luces de los ojos, las del Q-mind y hacer sonar un pitido. Lo básico pero imprescindible para que los más peques comiencen a experimentar.
El modo de evitación de obstáculos
La verdad es que no hay mucho que decir, es un clásico de los robots con sensores y le permitirá navegar con mayor o menor fortuna por casa. Divertido para realizar circuitos y reflexionar cómo lo hace y por qué falla cuando falla. O intentar mejorarlo programando nuestro propio sistema de evitación más adelante…
El modo música
Si tienes un robot capaz de realizar sonidos básicos ¿por qué no poner un teclado y unas cuantas canciones?
El modo patrulla

Aquí es cuando daremos las gracias de poder utilizar la cinta negra incluida. Lo hemos probado en un circuito sencillo y funciona muy bien.
Programando Q-Scout con la app o en el ordenador
La app permite 2 modos de programación, ambos por bloques, llamados “Programación primaria” y “Programación intermedia”.
- El primero, programación primaria, es muy sencillo y sin acceso a sensores, pero ideal para una primera toma de contacto.
- Y el segundo, programación intermedia, está basado en nuestro querido Scratch. Con este podréis controlar todo lo que os ofrece Q-Scout a nivel de sensores y demás. Por cierto que la aplicación está en castellano, con algunas traducciones dudosas, pero que no afectan en ningún caso al disfrute del robot. Y creo que las han mejorado con la última actualización.
Los modos de programación están escondidos en la sección “My application” y tienen unos cuantos programas de muestra. Hay algunos que están pensados para funcionalidades o sensores que no lleva el Q-Scout (creemos que son para su hermano mayor, el Qoopers).
Con la aplicación de ordenador tendremos acceso al modo de programación intermedia (el Scratch que decíamos antes) y al código en Python. Llamadnos clásicos, pero nos gusta programar con Scratch en el ordenador. Tenemos más espacio, nos resulta más fácil organizar las ideas y el ratón siempre funciona como esperamos. Después se envía por USB o Bluetooth al Q-Scout, y a jugar.
¿Algo más sobre Q-Scout?
A veces nos quejamos de que faltan materiales accesorios de algunos de los robots que comentamos. Pero no es el caso, desde la página de Robobloq se puede descargar un pdf con actividades pensadas para que los peques saquen todo el partido al Q-Scout. Están en inglés (qué pena no tener versión en castellano) pero están muy bien.
En este caso son 77 páginas que pasan desde las introducción al robot a cada una de las funcionalidades del Q-Scout con una marcada voluntad didáctica. Por buscarle algún pero: la temática guerrera nos sobra un poco, aunque esté enfocada desde la protección y la búsqueda de la paz.
Por otro lado Robobloq tiene a la venta unos cuantos sensores para ampliar las funciones del robot. Los podéis encontrar aquí, son de sonido, luz, temperatura y humedad, giroscopio y alguno más. De momento no nos consta que estén a la venta en España pero corregiremos el artículo si llegan.
Cotilleando por Youtube hemos visto un vídeo de que son compatibles con micro:bit, pero no hemos encontrado mucha más información al respecto.
Q-Scout es un kit de robótica recomendado a partir de 8 años (con mucha supervisión adulta, especialmente en el montaje). Creemos que los niños a partir de los 10-12 años le podrán empezar a sacar todo su potencial.
Conclusión
Perfecto como introducción a la robótica educativa y la programación con Scratch para después avanzar con Raspberry Pi y Python. Q-Scout es un kit de robótica muy del estilo mBot pero más grandote (su mayor punto débil es que existe el otro en el mercado).
Nos encanta su color verde. La robótica y programación fuera del aula continúa estando más enfocada (o llama más la atención) a niños así que muy a favor de que sea de un color menos relacionado con los estereotipos de sexo por colores.
El precio está a 99,95 €, si ya pudiesen bajar algo más el precio, creemos que sería un punto extra respecto la competencia.
Si te interesa verlo en directo, pásate por la tienda RCTecnic, también lo tienen disponible online. Y si eres de Amazon, aquí el enlace de compra.